El Ayuntamiento proyecta culminar la conexión de la calle Nilo con Sierra Nevada y Plataforma de San Nicolás con la demolición de una vivienda que ahora interrumpe su continuidad y la edificación de un muro que apoye la nueva calzada.
La parte alta del risco de San Nicolás verá mejorada su accesibilidad de la mano de la actuación que proyecta el área de Urbanismo del ayuntamiento de la capital Gran Canaria, que va a permitir culminar la continuidad de la calle Nilo y su conexión con Sierra Nevada y Plataforma de San Nicolás.
El proyecto municipal, que cuenta con un presupuesto base de licitación de 177.036 euros y un plazo de ejecución de cinco meses, contempla la demolición de una vivienda de aproximadamente 12×7 metros en planta y tres alturas escalonadas en la ladera.
Esta edificación se encuentra fuera de alineación e interrumpe en la actualidad la continuidad de la referida calle Nilo, pues solo permite el paso de peatones por un espacio que cuenta con apenas 1,50 metros de ancho, y el Ayuntamiento ya ha procedido a su expropiación.
Una vez desaparezca esta vivienda, tal y como se recoge en la memoria del proyecto, se procederá a construir una calzada mixta de peatones y vehículos que contará con 5 metros de ancho “ con un firme rígido idéntico al existente”.
Esta vía que se va a reconstruir tiene una longitud de 7 metros y va a permitir conectar los dos extremos de la calle Nilo y, por consiguiente completar la unión con sierra Nevada y Plataforma de San Nicolás.
MURO DE CONTENCIÓN. Además, la obra a ejecutarse en esta vía de risco capitalino implicará, como apunta el concejal de Urbanismo del Consistorio, Javier Doreste, “la demolición de un muro que se encuentra en mal estado y que se va a sustituir por otro”, de 6 metros de altura, de hormigón armado que dé apoyo a la nueva calzada resultante.
Si bien, se establece en la memoria del proyecto que una vez demolida la edificación que ahora interrumpe la conexión de la calle Nilo, se comprobará la cimentación y la estabilidad del talud de 6 metros previsto y, “en caso necesario, se recalculará sus dimensiones”.
Así mismo la memoria de esta actuación propone, dado que en otra zona de la calle Nilo se ha detectado la presencia de una cuevas “que formaron parte antiguamente de la ampliación de las viviendas que se encuentran a menor cota, en la calle Tesoro” y que se ubican “ en el subsuelo de un solar de titularidad municipal”, “la anulación de las cuevas mediante el relleno de hormigón y la adaptación del solar municipal colindante con la nueva rasante de la calle Nilo”, empleando para ello “una estructura de pórticos y forjados de hormigón que ayudarán a la estabilidad del muro de contención del vial”.
Las excavaciones, tal y como recoge del documento, “se efectuarán con medios manuales para evitar afectaciones a las viviendas colindantes y por la imposibilidad de acceder con maquinaria”.
Se puntualiza, además, que “se desmontará el techo de las cuevas para su posterior relleno y se nivelará el terreno para la ejecución de la cimentación”.
Así mismo, se indica que “en los precios de desmontes y excavaciones se contempla la posibilidad de ejecutarlos a mano con maquinaria de pequeñas dimensiones” pues resulta imposible acceder con maquinaria pesada.
Además la memoria de la actuación que prevé el Consistorio capitalino apunta que antes de acometer la cimentación de las cuevas, será necesario “visitar las viviendas por las que tienen accesos” a las mismas y “comprobar su total desocupación” para, a continuación, proceder a “condenar dichas entradas”.
El concejal de Urbanismo, Javier Doreste, comenta que esta actuación prevista para el risco de San Nicolás “va a permitir que una ambulancia o un vehículo de emergencia o de servicio público o un vecino entre directamente” desde la calle Sierra Nevada “hasta el centro del barrio”. Esto, entiende, va a suponer una mejora notable de cara a la movilidad de los vecinos del barrio. En cuanto a cuándo entrará en licitación esta última fase del anillo, explica que se encuentra “en mesa de contratación” y recuerda que “según la nueva Ley de Contratos, no podemos dársela a Geursa para que la haga directamente” porque esta normativa, en uno de sus artículos, “impide que el Ayuntamiento contrate con empresas municipales que no puedan ejecutar lo acordado con medios propios” y “Geursa no es una empresa constructora”. Esto reconoce, supondrá un retraso en la adjudicación, pero en cualquier caso permitirá completar una conexión que los vecinos aguardan hace años.