El barrio de Lomo Blanco ya cuenta con un nuevo parque deportivo y de ocio de 12.000 metros cuadrados, que se pone en marcha gracias a una inversión de 1.585.903 euros de fondos propios del Consistorio después de que el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, a través del Instituto Municipal de Deportes, finalizara este equipamiento. Un espacio polifuncional, con zonas para deportistas, áreas de descanso, esparcimiento e incluso una completa instalación para mascotas.
El Alcalde Augusto Hidalgo supervisó la obra junto con los concejales de Urbanismo, Javier Doreste; de Deportes, Aridany Romero, y del Distrito Vegueta, Cono Sur y Tafira, Prisco Navarro. Un proyecto que, tal y como reconoció el regidor capitalino, “da cumplimiento a una antigua reivindicación de los vecinos del barrio y del Distrito Vegueta, Cono Sur y Tafira”.
“Esta instalación cuenta con todo tipo de equipamientos y usos, tanto para el disfrute de los vecinos de Lomo Blanco como de los barrios colindantes, repitiendo el éxito de otros modelos de la ciudad como el del Parque Romano”, reconoció el regidor capitalino.
En este sentido, Hidalgo subrayó que “nos encontramos ante una de las instalaciones de ocio y deporte más grandes y mejor dotadas con las que cuenta Las Palmas de Gran Canaria, disponiendo en este revitalizado espacio con diversas instalaciones deportivas, calistenia, parque infantil, merenderos, mirador, quiosco, parque para mascotas, pista para ‘runners’ y amplias zonas de esparcimiento”.
Por su parte, el concejal de Urbanismo, Javier Doreste, calificó este proyecto como “un ejemplo de las políticas de este gobierno local, fomentándose las sinergias entre Urbanismo, Deportes y la Concejalía de Distrito. Potenciamos infraestructuras verdes y equipamientos de activación física para coser mejor la parte alta de la ciudad con la baja”, añadió.
El edil de Deportes, Aridany Romero, destacó también la colaboración entre la (GEURSA) y el IMD, llevándose a cabo la licitación de este proyecto a través del área de Deportes, “manteniendo varias reuniones en los últimos dos años con los colectivos vecinales y deportivos del barrio, consensuando soluciones y propuestas para convertir este espacio abandonado en una infraestructura modélica, moderna y con un amplio abanico de opciones. Este proyecto tiene un carácter deportivo pero también social. Es una de las instalaciones de ocio libre más grandes de la ciudad y no será la última”, aseveró.
El nuevo equipamiento incluye una pista de footing, a modo de hilo conductor de una sucesión de áreas con diferentes usos, tales como canchas multideportivas, parque infantil, plaza, skatepark, parque para perros, zona con aparatos biosaludables y de entrenamiento físico, merendero, mirador y quiosco con terraza, todo ello acompañado de abundante vegetación, jardines y árboles de porte, y mobiliario urbano con el objetivo de crear zonas de reposo y descanso para toda la familia. Además, se ha construido una plaza con pérgolas para generar espacios de sombra, bancos y un escenario, con una superficie total de 622 metros cuadrados.
El proyecto también ha contemplado una solución para el desnivel presente entre la calle Ana María Margenat y la plataforma del antiguo campo de fútbol mediante una sucesión de rampas, taludes ajardinados, escaleras y gradas, que facilitan su relación con el núcleo urbano y mejoran los accesos al colegio y al nuevo campo de fútbol, relacionándose además con el borde del barranco de Guiniguada, de gran valor paisajístico. El nuevo parque es, además, de fácil accesibilidad, especialmente desde la calle Ana María Margenat, donde se han acondicionado recorridos peatonales y ciclistas.
La nueva infraestructura dispone de una pista deportiva de 3 metros de ancho y 500 metros de recorrido alrededor del nuevo campo de fútbol. También se ha dispuesto un área multideportiva con una superficie de 482 metros cuadrados, donde se posibilitan los juegos de petanca y ping pong, así como de fútbol y baloncesto no reglados. Asimismo, los vecinos cuentan con aparatos de activación física y con multitud de elementos para el ejercicio, en otra zona de 595 metros cuadrados.
Este equipamiento también incluye una pista de skatepark, diseñada por una empresa especializada con una superficie prevista es de 790 metros cuadrados.
El parque infantil dispone de 724 metros cuadrados y contará con un elemento singular de escalada, columpios para distintas edades, toboganes y juegos didácticos sobre una superficie de topografía ondulada. También incluye un parque para perros, con doble acceso, vallado y totalmente equipado, de 550 metros cuadrados.
Además, el área se ha completado con un merendero, ubicado en el extremo norte de la actuación, al borde de la ladera del barranco de Guiniguada, con bancos y zonas de sombra mediante pérgolas. Junto al merendero se ha incluido un mirador, de unos 150 metros cuadros, que contempla el cauce del barranco y el mar.
Las áreas ajardinadas suponen 1.164 metros cuadrados, que terminarán de acondicionarse con la plantación de 180 árboles y palmeras. Además, se ha posibilitado la instalación de una pequeña cafetería-terraza con marquesina en una superficie de 196 metros cuadrados, previendo las acometidas y suministros de servicios necesarios.