El área de Urbanismo y Vivienda del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, presentará con cargo a los fondos Next Generation un proyecto para crear un cinturón verde entre Ciudad Alta y Tamaraceite que abarca un espacio de cerca de medio millón de metros cuadrados.
La iniciativa de regeneración de la biodiversidad autóctona y renaturalización urbana, que cuenta con una inversión de 4 millones de euros, permitirá plantar 10.300 nuevos árboles en una zona que comprende los barrios de Tamaraceite, Hoya Andrea, Las Torres, La Ballena, Los Tarahales, Siete Palmas y La Mayordomía.
La Comisión de Pleno de Desarrollo Sostenible celebrada hoy ha aprobado la presentación del proyecto por parte del Consistorio a la convocatoria de subvenciones para la renaturalización y resiliencia de ciudades 2022 perteneciente al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España.
El edil de Urbanismo, Javier Doreste, ha señalado que “vamos a presentar al Estado un ambicioso Plan mediante una inversión de 4 millones de euros que nos permitirá crear un pulmón verde en la ciudad, recuperando y ampliando la biodiversidad autóctona, plantando más de 10.000 nuevos árboles en una superficie que abarca cerca de medio millón de metros cuadrados del municipio”.
“Esta acción se suma a un conjunto de 30 proyectos verdes que hemos desarrollado en los últimos años que han contribuido a mejorar la calidad del medio ambiente en la ciudad como la generación de nuevos parques, corredores verdes, la renaturalización del barranco de Gonzalo en el Cono Sur, la recuperación del barranco Guiniguada o la compra de la Montaña de Chanray con la intención de crear senderos y miradores para el disfrute de los ciudadanos”, ha aseverado el edil.
Detalles Cinturón Verde
Se propone un proyecto identificado como Corredor Verde de Tamaraceite‐Ciudad Alta que se formaliza mediante una sucesión ordenada de espacios de regeneración de la biodiversidad autóctona y renaturalización de la ciudad consolidada en su borde suroccidental. La actuación se divide en tres vertientes: una de planificación de la infraestructura verde, otra de actuaciones de renaturalización de la ciudad y una tercera de comunicación, participación y seguimiento.
La actuación, que cuenta con un plazo de ejecución comprendido entre los años 2023 y 2025, consiste la replantación de arbolado termófilo, de palmeral canario, de matorral termomediterráneo y de formaciones autóctonas de entornos basales o cercanos al ámbito costero con el objetivo de contribuir a la renaturalización de una zona neurálgica de la ciudad. El proyecto incluye la plantación de 10.300 nuevos árboles entre especies arbustivas y de gran porte.
El ámbito de actuación del proyecto comprende la ampliación del Lagartario del Barranco de Tamaraceite, la creación de áreas de biodiversidad autóctona en La Mayordomía y el Barranco de La Ballena, la renaturalización de espacios en Hoya Andrea y Los Tarahales, Las Torres y la construcción de una red de conectores verdes
El proyecto serviría como inercia para multiplicar la respuesta municipal frente al cambio climático, ayudando a descarbonizar el aire urbano mediante sumideros de carbono e incentivar el control de los futuros riesgos de acontecimientos de inundación.
La iniciativa se acompañaría de un Plan Director de la Biodiversidad y la Infraestructura Verde para el conjunto de Las Palmas de Gran Canaria. La solicitud de la subvención con cargo a los fondos Next Generation, que ha sido aprobada en la Comisión de Pleno de Desarrollo Sostenible celebrada hoy deberá ser refrendada en la próxima sesión plenaria.